Por una época de hormonas,también radioafónicas
Toda mi vida he estado intentando demostrar a los demás y a mí mismo que no soy un fracasado, sino todo lo contrario, un profesional de ideas brillantes y con un talento especial para comunicarlas lúcidamente a través de las ondas. He invertido toda la vida y ahora que tengo mi propio programa en la radio que es líder de audiencias, ahora que todas mis ocurrencias entretienen o emocionan a los oyentes de media España, a mis padres, tan lejanos ya de mí, no les interesa reconocer en mi voz la de su locutor favorito, lo que me lleva a pensar que, quizás, haya fracasado como hijo.
*Una voz radioafónica ha sido elegido para formar parte del libro que recopila 123 textos seleccionados en la convocatoria “Prendí la radio y se encendió el aire”, realizada en ocasión de conmemorarse 25 años de creación de la FM CALF-Universidad Nacional del Comahue (Argentina). Comparto espacio con un seguidor habitual de este blog, Francisco Marcos Roldán (Ponfiel).
¡Enhorabuena Rubén!
ResponderEliminarReconocimiento merecido, sin duda.
Un saludo.
Gracias, Pedro. No lo tengo yo tan claro. Este micro tiene tres años, y no tenía yo la fórmula tan engrasada aún...
EliminarFelicidades compañero. Si me permites voy a añadirte en mi blog. Es un placer tenerte como compañero de fatigas, no sabes cuanto.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
¡Gracias! Otra vez juntos, sí señor, y ya van...
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